Colegas,
alumnos y amigos, comparto mi posición y propuesta sobre el conflicto
universitario:
DETENGAMOS
EL PLAN ANTIUNIVERSITARIO DEL GOBIERNO
SÍ
AL PARO UNIVERSITARIO
Hay
muchos miedos sobre el paro indefinido. Uno de ellos es el miedo a que se
entienda como paro subversivo, con consecuencias represivas.
Sin
embargo, es el recurso que nos queda tras años de exigir el cumplimiento de
nuestros derechos constitucionales, a existir como universidad libre y plural y
a una vida decente como profesionales.
Agotadas
las opciones de diálogo, protestas y paros parciales, nos queda el paro
nacional indefinido como opción para hacer retroceder el plan de destrucción de
las universidades democráticas. Plantando justa lucha democrática, ejerciendo
nuestros derechos constitucionales a la protesta, a la huelga.
Si
16 de 18 universidades asociadas en FAPUV ya han decidido el paro, es absurdo
que la UCV y LUZ no se sumen. El conflicto universitario es nacional, no local,
y lo que decida el gobierno se aplicará a todas por igual.
La
mayoría de 40.500 profesores universitarios del país están dispuestos a ir a
una de las huelgas más justas de la historia de esta nación. Este el más
contundente referéndum.
El
caso es que éste no es cualquier gobierno, como los anteriores de nuestra
historia. Tiene un plan, convertir a las universidades en centros de
adiestramiento ideológico y someter al país a un apartheid de
control social con profundas desigualdades sociales. De eso se trata el chip de
gasolina en Táchira y de la tarjeta cubana de racionamiento del Zulia, de eso
se trata el monopolio comunicacional, de eso se trata los vergonzosos salarios
universitarios.
Este
es un gobierno de funcionarios retorcidos y corruptos, que ve a las
universidades autónomas como “lacras”. Por ello nos asfixian financiéramente, bajo la pervertida idea de no financiar a profesores
“contra-revolucionarios”.
Tampoco tiene escrúpulos para pagar y sostener
círculos armados ilegales como sicariato represivo para provocar terror.
Este
no es cualquier gobierno, es el gobierno que ha llevado al país a la quiebra, a
Venezuela, uno de los países con más ingreso percápita. Ha
dilapidado, despilfarrado y robado el mayor volumen de recursos que jamás haya
recibido nuestra nación en toda su historia republicana.
Y
quieren continuar. Quieren someter al país a la pobreza, a salarios miserables,
al control del consumo, a mayor control de las divisas, a la ignorancia y la
mediocridad educativa. Quieren convertir a Venezuela en un corral y apropiarse
por completo de su renta. Se trata de un grupo de funcionarios retorcidos y
corruptos.
Hay
que detenerlos, hacerles retroceder, hasta que podamos cambiar de gobierno,
democráticamente. En democracia es normal cambiar a los gobiernos, sobre todo
cuando son malos. Y este es peor que malo. Es un gobierno que nos desconoce y
discrimina y hace imposible vivir en democracia. Aspirar un mejor gobierno no
es subversivo, es democrático, es constitucional.
El
único modo de enfrentarlos es plantar protesta democrática, ejerciendo
plenamente nuestro derecho constitucional a huelga, con movilización popular.
Es la opción de lucha que nos queda en esta etapa.
Colegas
profesores universitarios, no defraudemos a nuestro país. La huelga es
más que justa, es por el salario, por el presupuesto, por la libertad de
pensamiento, por la dignidad humana, por la democracia en Venezuela.
Votemos
SÍ en el referéndum de la APUCV.
Prof. Bernardino
Herrera León
Investigador
docente del Instituto de Investigaciones de la Comunicación (ININCO),
Facultad de Humanidades y Educación, Universidad Central de Venezuela.